La Mano de Fátima, también conocida como Hamsa o Jamsa, es un símbolo que se utiliza en diversas culturas y tradiciones espirituales, especialmente en el mundo árabe y en algunas corrientes del misticismo. Se cree que proporciona protección contra el mal de ojo y atrae buena suerte.
Cuando se combina con la idea de los 7 chakras, la Mano de Fátima puede ser vista como un símbolo que representa no solo la protección espiritual sino también el equilibrio energético del cuerpo. Los 7 chakras son centros energéticos situados a lo largo de la columna vertebral, cada uno relacionado con diferentes aspectos físicos, emocionales y espirituales: